En este viaje por tierras castellanas tenía un objetivo principal que era hacer el tramo del Destierro de la ruta del Cid que el año pasado nos fue imposible hacer cuando estaba todo planeado, incluso los hoteles reservados.
Teníamos unos cuantos días por delante para llevarla a cabo y así ir jugando con ellos según la meteorología e imprevistos que se nos presentasen. El lunes lo íbamos a dedicar a conocer Burgos y Vivar del Cid de la ruta y Puentedey, Orbaneja del Castillo y Aguilar de Campoo por interés personal.
Por fin, después de ver tantos videos de Dos Ruedas una Historia y leer sobre la ruta, a las 9:30 de la mañana ya estábamos puestos en carretera con destino a la oficina de turismo de Burgos.
Mañana algo fría para ir en moto pero en peores
plazas hemos toreado. Dejamos la moto debajo de unos soportales en el centro de
la ciudad y desde ahí buscaríamos la oficina de turismo a pie pero poco tuvimos
que caminar, estaba en la misma calle.
Aquí en petit comité, una gran falta de
profesionalidad del chico que nos atendió, todo eran pegas por ser lunes, era
día de descanso del personal de los museos, monasterio, etc. Limitate a dar la
información de la ciudad, puntos de interés turístico de la misma y añades que
al ser lunes están de descanso, todo lo contrario, desde que nos vio entrar lo
primero después del buenos días fue, "es lunes y todo cerrado".
Cuando terminó de darnos todas las negativas a
visitar la ciudad le expuse que nosotros íbamos a hacer la ruta del Cid, que en
esta ocasión poco nos interesaban otros monumentos. Sacó los salvoconductos,
los selló y nos deseó buen viaje ... tic tac tic tac tic tac, alguna
información sobre la ruta, el Burgos del Cid, tic tac tic tac, pues no, tuvimos
que descargarla de la página del consorcio.
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Costó conseguirlos. |
Ya con los salvoconductos en mano decidimos recorrer el itinerario de la ciudad y más tarde acercarnos hasta Vivar del Cid y continuar nuestro viaje de ese día hasta Aguilar de Campoo.
Comenzamos por el arco de San Martín, puerta por la que entró Rodrigo en Burgos después de recibir la orden de abandonar Castilla.
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Arco de San Martín. |
Junto a este arco se encontraba otro de los puntos del itinerario, el Solar del Cid donde se encontraba la residencia de Rodrigo pero en la actualidad hay un monumento de José Cortés erigido en 1784 con los escudos de Burgos y San Pedro de Cardeña a cada lado del blasón del Cid con una leyenda conmemorativa.
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El Solar del Cid. |
Continuamos nuestro camino hasta la iglesia de Santa Gadea o Águeda, en la cual según la leyenda el rey Alfonso VI prestó juramento ante el Cid negando su participación en la muerte de su hermano Sancho II.
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Santa Águeda. |
En su interior encontramos a una señora de una edad muy avanzada que se prestó a explicarnos toda la historia del templo y dejándonos anonadados con la agilidad mental que tenía, recitaba nombres, hechos y fechas una detrás de otra sin la menor duda pero lo más gracioso ocurrió al final que dice la buena señora, "esta no es mi parroquia, yo solo he venido a ayudar a unas amigas".
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Altar de Santa Águeda. |
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Sonia atenta a las palabras de la señora. |
Nos despedimos de la señora y tomamos rumbo a la Catredal para visitar el sepulcro de Rodrigo y Jimena.
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Haciendo propaganda de nuestra prueba hitórica. |
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¡¡¡Que enamorados se ven los tortolitos!!! |
Abonamos la entrada correspondiente pero únicamente porque en su interior se encontraban los sepulcros del matrimonio y el cofre del Cid porque ya os adelanto que iba a ser que no soltaba un duro, ya tienen bastante que tacho la casilla de la iglesia en la declaración.
La construcción comenzó en el año 1221 y siguiendo patrones góticos franceses. Sufrió algunas modificaciones en los siglos XV y XVI.
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Interior de la Catedral. |
Los restos del Cid y su esposa reposan en la catedral desde el año 1921 ya que inicialmente lo hicieron en el monasterio de San Pedro de Cardeña pero durante la ocupación francesa y por temor a profanar las mismas se trasladaron al paseo del Espolón hasta 1842 que se volvió a trasladar a la capilla de la Casa Consistorial. Y dicen que el baúl de la Piqué tiene kilómetros, pues los restos del Cid no se quedan cortos teniendo en cuenta que murió en Valencia.
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Sepulcro de Rodrigo y Jimena. |
El Cofre del Cid se encuentra en la capilla del Corpus Christi, en el claustro de la Catedral y recuerda uno de los famosos episodios del Cantar con el engaño a los judíos Raquel y Vidas. Según cuenta, el cofre fue lleno de monedas pero en realidad iba lleno de arena con las que el Cid avalaba el dinero líquido que necesitaba para mantener su mesnada y que le dieron los judíos anteriormente citados al salir de Burgos camino del destierro.
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Cofre del Cid. |
Siguiente parada era el Arco de Santa María, una de las doce puertas de acceso que tenía la ciudad en la Edad Media, construyéndose en forma de arco triunfal entre los años 1536 y 1553.
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Puerta de Santa María. |
Por esta puerta salió el Cid de la ciudad de Burgos para acampar en la Glera del Arlanzón junto con sus fieles en su primera noche de destierro.
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La Glera del Arlanzon. |
Impensable era abandonar la ciudad sin pasar por la plaza de Mio Cid, en el centro de la misma se levanta una obra esculpida en bronce por Juan Cristóbal e inaugurada en 1955. En la cual el Cid con la espada en mano, capa al viento y su larga barba monta a Babieca y como todos sabemos, el caballo está apoyado en tres patas porque el Cid murió a causa de las heridas sufridas en combate. Si llega a morir de forma natural, el caballo tendría las cuatro patas apoyas, por el contrario, si hubiese muerto en combate, el caballo sólo estaría apoyado por las dos traseras.
Por ese día nuestra estancia en Burgos estaba terminada, al día siguiente volveríamos pero a un fin muy diferente pero tampoco quiero seguir contando más, que adelanto las cosas y de este día aún quedaban unos cuantos kilómetros que recorrer.
La siguiente parada era Vivar del Cid, pueblo natal de nuestro héroe y en la que íbamos recomendados por David Alejandro a casa de Javier Alonso pero con la mala fortuna que no se encontraba en casa a lo que su mujer Isabel nos atendió de mil maravillas y nos abrió las puertas de su museo privado sobre el Cid.
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Mis dos niñas. |
Vivar del Cid es una aldea de unos 250 habitantes, perteneciente al municipio de Quintanilla de Vivar.
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Notario mayor del Reino. |
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La bella damisela degustando el dulce. |
Como adelanté un poco más arriba, Javier Alonso con se encontraba en casa y mientras hacíamos tiempo, su señora nos invitó a un dulce típico de la zona, tejas, estaban buenísimas esas tejas y en la foto anterior quedó plasmada Sonia con la boca llena de tejas.
Hechas las fotos de rigor con la Tizona en la legua 0, no podíamos demorarnos más y agradeciendo de todo corazón a Isabel por el trato recibido pero sólo unos metros porque la siguiente parada era el Monasterio de Nuestra Señora del Espino, de la orden de Clarisas y en su cenobio se guardó el manuscrito del Cantar de Mio Cid hasta 1776. En 1960 lo compró la Fundación Juan March que lo cedió a la Biblioteca Nacional.
Aprovechamos y compramos una caja de tizonas, unos dulces que hacen las hermanas clarisas del convento y que llegaron de milagro a Palencia, no se me fue la tentación de meterle mano a la caja en toda la tarde.
De Vivar tomamos la antigua carretera de Burgo a Santander buscando el pueblo de Puentedey, el paisaje que nos rodeaba denotaba que en invierno los grajos no vuelan bajo, en esas tierras son topos, no tienen huevos de asomar el pico.
En unas de las largas rectas pasamos por Villalta, una aldea abandonada y decidimos parar y comer sentados en un antiguo bebedero de bestias.
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El bocata que no me lo toquen. |
Con el buche lleno continuamos camino hasta que el gps del móvil nos desvió por una pista de tierra y como la cabra tira al monte, allí que nos metimos a la aventura, despacio pero la cruzamos sin ningún problema hasta llegar al pueblo.
Puentedey que sería Puente de Dios es una localidad de 47 habitantes y que el gran atractivo como bien indica su nombre es el puente natural que ha formado el río Nela al erosionar la roca caliza donde sobre el que se asienta el pueblo.
Siguiente parada en Orbaneja del Castillo, otra localidad de Burgos con su encanto natural. La carretera con curvas muy divertidas y un piso nuevo.
Orbaneja se caracteriza por su paisaje kárstico moldeado por el agua.
La Cueva del Agua ha suscitado el interés a varios estudios geológicos ya que de ella parte el arroyo Horca Menor que desemboca en el Ebro pero antes atraviesa el pueblo y cae en cascada dirección a su desembocadura.
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El arroyo atravesando el pueblo. |
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La Cueva del Agua. |
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En cascada. |
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Camino de su desembocadura. |
Decidimos tomar el café en Aguilar de Campoo y terminado el café sólo nos quedaría en tirón de volver a Palencia.
Aguilar de Campoo ya pertenece a la provincia de Palencia y conocida nacionalmente por su industria galletera. En la década de los 80, 9 de cada 10 galletas que se consumían en España salían de las fábricas de Aguilar.
Aparcamos la moto justo en la Plaza Mayor y poder tomar el café viendo los soportales que rodean la plaza.
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Plaza Mayor. |
Antes de volver disfrutamos de un agradable paseo por las calles de la ciudad, llegando hasta el río Pisuerga y fotografiar el Puente Mayor, uno de los cinco puentes que tiene Aguilar.
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Puente Mayor. |
Decidimos volver a Palencia antes de lo previsto porque nos esperaba el primo de Sonia que aún no lo habíamos visto en los días anteriores y la familia es la familia.
La vuelta fue aburrida como todos los trayectos de autovía pero al esperarnos, no era plan de ir por la nacional. Llegamos sin ningún problema y con ganas de continuar al día siguiente con el Destierro.
Continuará ...