Desafío Invernal 2017 2ª Parte

Por fin el día del desafío y comenzaba la jornada con la alarma del móvil a las 5 de la mañana dando berríos y como siempre cuando uno está más cómodo en la cama y con la postura pillada a la almohada, que mala era la puñetera, así mi dolor de cuello.

A esas horas creo que hay un tío llenando el mar y otro poniendo las calles, no son horas para que gente normal ande por la calle en moto pero os aseguro que a las 5 ya se escuchaba más de una moto arrancada en el parking del hotel, esos son los fatigas de todos los años.

Bajamos a desayunar en vaqueros y zapatillas de deporte, los más cómodo posible, más tarde nos pondríamos el atuendo de la moto. El comedor estaba lleno de participantes, Jorgete y yo creíamos que íbamos a madrugar, jajajajajajaja.

Ya en el hotel principal y con el roadbook, tocaba meterlo en el rutómetro y comenzaron los problemas. Carlos estrenando el suyo tenía que cortar el rollo en dos porque no cabía en el interior y Jorgete necesitaba dos tornillos para echar a andar el suyo.

¡¡¡Me faltan dos tornillos!!! ¿de donde los saco?

Aquí la cosa iba bien.

Antes de salir del hotel teníamos que pasar por el photocall y menuda cola que había, todas las motos intentando salir a la vez cuando sólo hay un arco de salida, pero con paciencia y parando la moto para evitar el calentón se salió sin problema.

Nada más salir paramos para que repostaran Carlos y Cristo que no lo hicieron el día anterior.

Ya sólo queda uno por repostar.

Junto a la máquina.

Puestos en ruta nos desviamos antes de tiempo y en lugar de tomar la entrada de autovía hacia Ayamonte - Portugal, tomanos la de Huelva pero Carlos de percató pronto y cambiamos de sentido en la primera salida pero más de algún grupo se equivocó porque confundía el roadbook.

Desde que salimos del hotel hasta el primer control, las paradas fueron breves por llamarlas de alguna manera ya que la primera fue para indicarnos Carlos que nos habíamos despistado y la segunda en terreno portugués para poner los móviles en modo avión, Jazztel estaba frotándose las manos con roadming.

El primero control fue en el mirador de un Parque Natural donde demoramos la parada para que Jorgete reparase su roadbook robando los tornillos de una papelera, ¡¡¡A otro sitio donde no podemos volver!!!.

¡¡¡Chorizo!!!

Los desayunos de la venta Alonso pasan factura.

Pero allí estaba Cristo para reponer esos tornillos que se le quitaron a la papelera, menos mal que llevamos en el grupo algún responsable.

Este año decidimos alargar más las paradas y en los puntos de control prácticamente pasábamos volando, parada, sello y acelerando de nuevo que nos pillaba el toro.

Entre controles tuvimos que hacer una parada técnica para que Carlos apretara el espejo retrovisor y aproveché para fotografiar el río.

Parada obligatoria por ser prueba fotográfica la aprovechamos para descansar y tomar un café, aunque no hacía mucho frío pero se agradecía tomar algo caliente y yo degusté un mostachón de Utrera por cortesía de Fernando Sobrino. La parada se realizó en el pueblo luso de Alcautim, localidad de 1100 habitantes perteneciente al distrito de Faro.

Carlos reconoció a un matrimonio con el que estuvimos hablando en una terraza de la playa de Bolonia cuando salimos a hacer las pistas de aquella zona, eso es memoria fotográfica.

Mostachón de Utrera.

Como bien dije antes, el motivo de la parada en esta localidad era que teníamos que echarnos una foto en cada una de las estatuas repartidas por la zona aledaña al puerto, en total tres fotos.

La primera con un guardia de frontera que vigila el río de los contrabandistas.

El guarda de espaldas a nosotros, ¡¡¡vigilando!!!

La segunda con un contrabandista en la otra punta del puerto, donde no alcanza a vigilar el guardia.

La tercera era junto a la iglesia del pueblo donde un pescador cose sus redes.

Terminadas las fotos bajamos hasta el embarcadero donde la organización había puesto una carpa donde teníamos que enseñar las tres fotos hechas en esa localidad, la del día anterior delante del ayuntamiento de Cartaya y la otra con un marco en el hotel principal pero esta última nos faltaba, no teníamos ni idea.

De nuevo en la carretera no volvimos parar hasta entrar en España, lo hicimos en el siguiente punto de control que se encontraba en la localidad de Paymogo con 1300 habitantes, donde deberíamos de hacer la prueba de habilidad pero al llegar antes de tiempo tuvimos que esperar y esa espera la usamos para comer y tomar café.

Con el estómago lleno y saciado el mono de la cafeína nos fuimos a la prueba de habilidad que este año se lo han currado y era montarse en un toro mecánico y aguantar lo que pudieses, yo personalmente no tengo madera de vaquero.

Pasaportes sellados con la prueba de habilidad, teníamos que buscar una gasolinera para repostar, íbamos casi en la reserva y sólo había una en todo el pueblo, rápido para allá y no esperar cola. Las dos chicas de la gasolinera nos contaron que a esa hora ya estaba cerrada y que nos teníamos que servir nosotros y pagar por cajero automático pero que ese día tuvo que traer refuerzo porque no daba a basto, vamos, que no se va a ver en ninguna otra como ese día.

Esperando turno.

Con las motos listas para hacer otra tirada larga, salimos de Paymogo dirección el Rosal con unas rectas algo aburridas hasta el punto de tener que parar para que Jorgete se echase agua y refrescarse, le picaba el  gusanillo de la siesta.
Hasta llegar al siguiente control, muchas de las carreteras y alguno de los pueblos fueron puntos fotográficos en el Desafío del 2012+1, en los castillos de esas localidades.
En la Peña de Arias Montano hay una ermita, a Reina de los Ángeles, en la cual había una peregrinación, a la entrada de los aparcamientos había una chica cobrando entrada a la zona de aparcamiento y un policía local, ambos con chaleco reflectante, llevando a más de un participante a la confusión creyendo que era un control de la organización.
De la Peña bajamos hasta la entrada al pueblo pero justo antes de entrar nos desviamos a la derecha dirección a la venta del Cruce, donde estaría situado otro de los controles. La carretera era divertida por las curvas y después de la buena tirada que dimos desde Paymogo se nos apetecía meter un café en el cuerpo, mejor dicho pedimos un descafeinado por la hora que era.

Salimos de la venta hacia el siguiente control y último antes de llegar al hotel. Cruzamos la localidad de Almonaster la Real, localidad participante en la edición 2012+1, con la prueba fotográfica delante de su castillo - mezquita.
Al salir del pueblo la carretera era estrecha y había que circular con precaución pero al poco de circular por esa carretera entramos en una ancha y con buen piso para disfrutar un poco de velocidad, tumbar y recuperar algo de tiempo.
Pasado el último control nos dirigimos directamente hacia el hotel, pasando por Tharsis, localidad con unas minas de azufre explotadas por los ingleses durante los siglos XIX y XXI.
Llegados al hotel a las 19:30 tuvimos que esperar un rato en cola para acceder a la zona del photocall.

A esperar.

Hecha la foto y sellado el pasaporte con la llegada, nos dirigimos a aparcar las motos y a la mesa para que nos prepararan los diplomas.

No se aprecia bien, pero estamos todos juntos.

Mientras nos preparaban los diplomas bajamos a la terraza a tomarnos unas cervezas, que nos la habíamos ganado de sobra.

¡¡¡Por todos los que no habéis podido estar!!!

¡¡¡Que buen equipo hemos formado edición tras edición!!! Espero que el próximo año estemos como mínimo los mismos de este año y Jorgete, no podemos esperar ver a Cristo de Desafío en Desafío, algún día tendremos que ir a verlo a Coín, que parece que lo fichamos sólo para este evento.
Cristo, dile a Mati que te compre un camión de arena y que la eche en el patio, así vas practicando para el próximo año que no te libras de una pista, sólo una.
Por último agradecer a Moteros Gaditanos y colaboradores el formidable fin de semana que nos habéis hecho pasar y cada año os superáis con el evento.

Toda la ruta, hasta con  el despiste del principio.